El pequeño P.F., de seis años, tenía graves dificultades para poder expresarse, le encantaba escuchar música, sobre todo la de un cantante español muy conocido. Su madre encontró la forma de comunicarse con él a través de sus canciones. Ella sabía de su estado de ánimo dependiendo de la reacción que tenía cuando le ponía alguna canción de su cantante favorito. La música era su único medio de comunicación.

En la Unidad de Paliativos se pusieron en contacto con la Fundación 38 grados para ver si era posible llegar a ese cantante y conseguir un mensaje de apoyo. A través de todos los amigos y colaboradores de la Fundación, nos pusimos en contacto con este famoso cantante y P.F. y su familia recibieron un bonito mensaje de cariño en estos difíciles momentos. Falleció, pero este cantante recibió en persona a la madre de P.F., después de uno de sus conciertos. Sin duda un momento inolvidable para ambos.