M tenía un sueño, comer en un restaurante con estrella Michelín y vivir ese momento especial de establecimiento elegante, menú sofisticado y chef creativo. Y su favorito era el restaurante El Bohío, del gran cocinero Pepe Rodríguez.
Por diferentes circunstancias se fue pasando el tiempo y cuando M tuvo que ser ingresada en un hospital ese deseo se hizo aún más fuerte.
En la Fundación 38 grados nos pusimos manos a la obra, contactamos con Pepe que desde el primer momento se ofreció a ser él mismo el que les preparara a M y su marido, JL, una especialísima comida para dos.
Una dificultad añadida era que M no podía dejar el hospital, pero gracias a la inestimable colaboración de sus médicos y todo el personal del centro pudimos preparar en una sala del hospital un auténtico salón digno del mejor restaurante. Y además contábamos con el mejor cocinero del mundo.
Y así fue como M y JL pudieron disfrutar de un menú especial elaborado para ellos por Pepe.
Fue sin duda un momento especial para ellos y para la Fundación un placer poderlo organizar.
Muchas gracias a todos los que lo hicieron posible y especialmente a Pepe por su generosidad y cercanía.
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