Según los tratados de biología, para que una mariposa pueda volar, los músculos de sus alas tienen que alcanzar una temperatura de 38 grados centígrados. Por este motivo las cinco mujeres que decidieron crear, sin ánimo de lucro la Fundación 38 grados (www.fundacion38grados.org) con una fuerte vocación de ayudar a las personas y a sus familias en el difícil momento de la despedida, tuvieron claro que su logo tenía que ser una mariposa azul volando. Las mariposas con sus colores han inspirado una idea común en culturas muy alejadas en el tiempo y en el espacio…
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