“Hoy es un día alegre para Joan y nuestra familia entre tantos días grises, gracias a vosotros, a toda esa gente maravillosa de la Fundación 38 grados que a hecho posible el esperado reencuentro con nuestros familiares y en especial con Raúl, el nieto de Joan”.
“No hay suficientes palabras para describir la alegría que sentimos en este momento.. Nos alegra que a día de hoy cuando las cosas son tan tan difíciles para nosotros y para todos, todavía haya la esperanza de encontrar a personas maravillosas dispuestas a ayudar al prójimo desinteresadamente”.
“Solo nos queda darles las gracias por haberlo hecho posible, con vuestra gran ayuda hoy las lágrimas de Joan y de todos nosotros son de alegría”.
