I.F. es de Rumanía, lleva ya varios años viviendo en España junto con su mujer y su hija. En Rumanía vive uno de sus hijos y su nieto pequeño R.F. Conscientes de la gravedad de su enfermedad, su hijo y su nuera vinieron a verle, pero no pudieron traer al pequeño. I.F. le echa mucho en falta y le gustaría volver a verlo y despedirse de él.

El equipo médico que le atiende se puso en contacto con La Fundación 38 grados e hicimos posible ese encuentro. I.F. se quedó muy tranquilo al poderse despedir de todos sus seres queridos.

Estuvimos con ellos y estaban muy agradecidos. Nos grabaron un mensaje precioso que nos hizo sentirnos felices del trabajo realizado.

Algunas de sus palabras de agradecimiento fueron, “me habéis hecho un regalo para el corazón”.